Mi compadre el Macho! 😈🔥

Mi compadre el Macho! 😈🔥

Comienzo describiendo a mi compadre, es el hermano mayor de mi esposa, mide cómo 1.70 es un poco gordo, moreno claro y siempre se había comportado como todo un macho, a tal grado de expresar su homofobia cada que tenía oportunidad, decía que si alguno de sus hijos le salía putito era capaz de echarlo de su casa. A mí sinceramente me molestaban sus comentarios.

Debo decir que él fue el segundo hombre que sintió mi verga dentro de su peludo ano, después de la deliciosa experiencia con mi ahijado, su hijo!

Cierto día recibí una llamada de mi compadre, eran como las 7 de la noche...

- Que tal compadre cómo está? 
- Todo bien y usted qué tal! Contesté
- Algo exaltado, me acabo de pelear con su comadre y salí a respirar aire fresco, necesito platicar con alguien y pensé en usted espero no molestarlo.
- Para nada compadre.

Me dio la dirección del bar donde se encontraba, le comenté a mi mujer la situación y salí al lugar; al llegar estaba sentado en una de las mesas del fondo con una cubeta de cervezas, su semblante era sombrío, en realidad si la estaba pasando mal, me dirigí hacia él, lo saludé, me ofreció una cerveza y tome asiento, me comentaba que las cosas no iban muy bien con su mujer, que cada vez se distanciaban más y en lo sexual ni se diga, ya saben platicas de hombres, transcurrió el tiempo y el alcohol hacía estragos en mi compa...

- Ya vámonos compadre ya está ebrio.
- No tengo intenciones de llegar a casa compa, gracias por escucharme, si se quiere retirar adelante.
- Y dónde pasará la noche?
- En un hotel de paso, necesito pensar mucho.
- Pues vamos compa lo acompaño. (La verdad es que quería asegurarme que no hiciera ninguna estupidez, nunca me imaginé lo que iba a pasar)

Pagamos la cuenta y salimos, llegamos por unas cuantas cervezas para el camino, entramos a un hotel cercano, sencillo.

- Vió Compa? En recepción pensaron que éramos putos!! Comentó mi compadre.

Solo solté una carcajada, para ser sincero, ese comentario me desconcertó un poco, aunque había algo de razón en el, dos tipos maduros entrando a un hotel, con cervezas a altas horas de la noche cualquiera pensaría lo mismo. 

Entramos a la habitación y de inmediato me tumbe en un pequeño sofá que se encontraba a la izquierda, puse las cervezas en una mesa pequeña frente a mi. Platicamos y bebimos por largo tiempo, noté que a mi compadre le ganaba el sueño, de vez en cuando cabeceaba, yo también me sentía ebrio para ese momento, me levanté al baño y cuando regrese mi compadre estaba completamente dormido, cómo pude lo levanté para llevarlo a la cama, la verdad fue bastante difícil, cuando lo recosté de espaldas a la cama caí sobre él y fue la primera vez que mi sentí sus nalgas, mi pene reaccionó, el olor a cerveza combinado con su fragancia de macho me envolvió y encendió bajas pasiones que para ese momento jamás hubiera imaginado saldrían de mi interior, me incorporé y lo vi ahí, indefenso, totalmente inconciente, le quite los zapatos y con bastante dificultad la camiseta también, lo gire, desabroché su cinturón y baje con cuidado su pantalón hasta retirarlo, no quería que despertara, tenía algo de nervios pero mi morbo era mayor.

Me desnude por completo y mi verga ya estaba a mil, la silueta del cuerpo de mi compadre me calentaba aún más, me acerque a su rostro y lo olía con delicadeza, su fragancia despertaba todos mis sentidos, saqué mi lengua y toque sus labios, con mucho cuidado baje por su cuello probando cada centímetro, lo rasposo de su barba, baje a su pecho y lamí sus pezones rodeados de pelos....

- Puta madree!! Pedote me saco el profundo suspiro que emitió mi Compa, pero ya era demasiado tarde, no había vuelta atrás, lo prohibido de la situación me animaba a seguir, era el hermano de mi hermana, mi compadre.

Baje besando su barriga hasta qué llegue a su boxer, le toque la verga por encima y comenzaba a endurecerse, le baje el boxer y nuevamente me acerque a oler su entre pierna, volví a lamer sus ingles y después sus bolas, me puse entre sus piernas incado en el piso para poder lamerle los huevos con mayor facilidad, en ese instante ya no me importaba que despertara mi compadre, pensaría en algo en caso de que eso pasara, levanté sus piernas un poco y deslicé mi lengua, fue la primera vez que pude probar su culo, soltó otro suspiro y noté que engarruñaba los dedos de sus pies, el olor penetrante de su ano me envolvía y me enloquecio por momentos, hasta qué un movimiento de su cuerpo volvió a asustarme, esta vez él se puso de costado, volví a acomodarme, le separé sus nalgas y nuevamente le lamí el culo, era delicioso, un esfínter apretado, rodeado de vello, mi lengua entraba cada vez más en su culito y pequeños gemidos comenzaban a escucharse en la sombría habitación...

Tengo que cogerme a mi compadre! ese pensamiento inundó mi cabeza y se repetía una y otra vez como una orden de mi inconciente, mientras aún mamaba el culo de mi compadre ensalive uno de mis dedos, hice movimientos circulares masajeando el esfínter y tratando de meterlo poco a poco, él dio un pequeño brinco cuando sintió la invasión de mi dedo en su interior, pronto se acostumbro y hasta levantaba el culito para sentirlo más profundo, metí un segundo dedo, la dilatación fue rápida, pronto entraban tres dedos fácilmente, mi compadre gemía fuerte, dudaba que siguiera dormido! 

Me acosté a su lado y tomando el tronco de mi verga lo acerque a su ano, fue cuando escuché la voz débil de mi compadre:

- Despacito Compa! 

Solo dijo eso y volvió a guardar silencio, yo no dije nada y apunte la cabeza de mi verga, presione y entro el glande, un suspiro se escapó de su interior y su esfínter apretaba el pedazo de carne que inundaba su ano, lo abracé y le acaricie los pezones, empuje otro poco, su respiración era agitada pero no hacía ningún movimiento para separarse, un último empujón fue necesario para que entrara toda mi verga, me detuve un poco para que se relajara, nuestros cuerpos para ese momento ya comenzaban a empaparse en sudor por lo candente de la situación, inicié un movimiento suave, metiendo y sacando un poco mi pene mientras su interior se acostumbraba al gorsor de mi verga, al paso de los minutos los movimientos eran más rápidos, después algo violentos, ninguno emitía ningún comentario, pero yo por dentro estaba que gritaba, quería tratarlo como a mí puta, pisotear su orgullo de macho, sodomisarlo y lo demostraba con la cogida que le estaba propinando, le saque mi verga y eleve sus piernas a mis hombros, le metí nuevamente mi verga de un solo golpe y lo cogía sin piedad, ambos bufabamos cómo bestias, para mí sorpresa aguantaba muy bien de la cogida haciendo honor al dicho de "los machos se aguantan", no emitía ningún gesto de dolor, más bien era de placer, cambiamos nuevamente, está ves lo puse en cuatro y nuevamente lo penetré, el sonido de mis huevos chocando en sus nalgas era fascinante, lo sostenía de su cintura y le embestida de manera tal que jamás se olvidará de la cogida del compadre, pronto sentí que terminaría y acelere mis movimientos, solté un grito desesperado al mismo tiempo que mi cuerpo temblaba y mi abdomen se contraía, solté 4 o 5 chorros de mecos en el interior de mi compadre, y me detuve un poco hasta sentir que había descargado todo...

En ese momento sentí vergüenza por lo que había pasado, el ambiente se tornó raro, hostil, me retire de mi compadre y fui al baño a limpiarme, mecos y un rastro de sangre estaban presentes en mi verga, me lave bien y me senté un rato a pensar lo que había pasado. 

Tomé el valor y salí del baño, mi sorpresa fue al ver que mi compadre siguió durmiendo, se escuchaban sus ronquidos, ni siquiera se limpió, con mucho cuidado le puse su boxer, me cambié y salí del hotel a comer algo, encontré unos tacos en la esquina, ya eran las 4 de la mañana, tenía dos horas para volver con mi compadre y saber que pasaría con la situación, volví al hotel, mi compadre ya estaba despierto y no menciono nada del tema, me sorprendió la naturalidad con la que me habló,

- Qué tal compadre buen día, descanso? Donde andaba? 
- Tenía hambre y fui por unos tacos. Tuve que disimular mi cara de asombro, se comportó como si nada hubiera pasado y decidí dejarlo así, me ahorraría muchos problemas y platicas incómodas, hasta este momento seguimos igual y nos vemos y saludamos con naturalidad, sabe si le gustó la experiencia, o tal vez no y quiso borrarlo de su memoria, solo el tiempo dirá si podré cogerme ese culito de nuevo.