El maduro me estrenĂ³
Quiero contarles mi historia, resulta que siempre me he considerado heterosexual y muero por las mujeres, ellas son mi mĂ¡s grande vicio a pesar de que soy casado. Pero llego un momento en el que me comenzĂ³ a dar morbo el poder estar con un hombre. Al principio me era un poco complicado ya que no tenĂa nada de experiencia con el tema, asĂ que comencĂ© a visitar numerosas pĂ¡ginas de sexo obviamente gay pero la mayorĂa eran muy indecisos y por lo mismo no me inspiraban confianza asĂ que comencĂ© a buscar mejor hombres maduros pero tambiĂ©n eran exigentes en cuanto a la informaciĂ³n, asĂ que un dĂa decidĂ ingresar tindr y buscar sexo rĂ¡pido y fue allĂ donde conocĂ a Mauricio un maduro de 55 años delgado y de buen ver, al principio quedemos de vernos en un lugar pero por el tiempo tuvimos que cancelar asĂ que se quedĂ³ pendiente.
Yo seguĂa con la espinita en mi interior de que se sentirĂa estar con otro hombre asĂ que un dĂa me decidĂ a todo y le dije que quedĂ¡ramos en un lugar para ir a coger, la verdad estaba muy nervioso pero el morbo y la calentura me ganaron y fui al lugar. Ya estando allĂ estaba muerto de nervios hasta que llego en un carro rojo no muy bueno que digamos pero lo que querĂa era sexo y ya.
Llegamos al auto hotel y nos pusimos cĂ³modos, la verdad me gustĂ³ mucho el lugar asĂ que me acerque a la ventana para ver hacia afuera y apreciar el paisaje, momento que Mauricio aprovecho para abrazarme por la espalda y frotar su bulto en mi culito hambriento. Sin saber que decir me quede quieto mientras me comenzĂ³ a tratar como hembra diciĂ©ndome tranquila cielo que estoy lo vamos a disfrutar y cuando me dijo esto me puso al 100 y no tenĂa palabras ya que sentĂa calentura y nervios al mismo tiempo. Lentamente me comenzĂ³ a acariciar todo mi cuerpo y fue quitĂ¡ndome la ropa poco a poco, primero empezĂ³ por la camisa seguido de mi pantalĂ³n y ya estando en bĂ³xer me dio la vuelta y me dio un tremendo beso con lengua el cual me pareciĂ³ un poco asqueroso pero por la calentura lo acepte y le comencĂ© a llevar el juego respondiĂ©ndole el beso de la misma manera.
RĂ¡pidamente se acostĂ³ en la cama boca arriba invitĂ¡ndome a ir con Ă©l y fue cuando me puso en posiciĂ³n para un 69, en ese momento pude apreciar una verga que no era la mĂa y esta estaba erecta y con unas venas que parecĂa que iba a reventarse y lo que mĂ¡s me llamo la atenciĂ³n fue su olor a macho tan rico que tenĂa asĂ que no dude en meterla a mi boca y aunque no sabĂa cĂ³mo mamarla me las arregle recordando los videos porno y pude sentir su sabor saladito que poco a poco fue degustando mi paladar y cuando menos lo esperaba sentĂ como la lengua de Mauricio comenzĂ³ a lamer mi ano dĂ¡ndome un placer riquĂsimo que jamĂ¡s habĂa imaginado, mientras me comĂa el culo me masturbaba lentamente haciendo que yo estuviera en un trance de placer inmenso.
Llego un momento en el que no aguante mĂ¡s y solo me levante y me decidĂ a sentarme en esa vega tan maravillosa que me tenĂa como loco a lo que Mauricio solo me dijo pero que putita me saliste ahora ya no aguantas las ganas de comer verga y se nota que tu culo lo pide a gritos y esas palabras me ponĂan mĂ¡s cachondo asĂ que acomode su verga en mi ano y me deje caer en su vega y debo confesar que me estaba doliendo ya que mi ano no habĂa tenido un invitado jamĂ¡s en su interior pero poco a poco se fue acostumbrando y cuando sentĂ su huevos chocaron contra mi culo y fue entonces donde comencĂ© a cabalgarlo lentamente hasta que mi culo dejo de sentir dolor y sentĂa gusto.
AsĂ pasamos un buen rato hasta que sentĂa que me venĂa y me dijo aun no putita porque estoy va a durar mĂ¡s y me agarro de la cintura y me puso en cuatro en la cama como ofreciĂ©ndole mi culo en tributo y lo primero que hizo fue lamerlo y besar toda mi raja llenĂ¡ndome de mĂ¡s placer y sin darme cuenta me la metiĂ³ de un solo y yo solo sentĂ un cosquilleo en mi interior y comienza con el meta-saca suave y despuĂ©s mĂ¡s agresivo, tanto asĂ que no aguante mĂ¡s y me vine soltando un chorro de semen y luego me deje caer en la cama boca abajo y el siguiĂ³ fallĂ¡ndome muy duro diciendo que culo tan rico tienes puta es mejor que el de mi esposa y el tuyo aprieta mĂ¡s rico y se come toda mi verga como si no hubiera un mañana, palabras que me excitaban aun despuĂ©s de haber eyaculado, y de un solo golpe me la metiĂ³ y se quedĂ³ allĂ gritando fuerte llenĂ¡ndome todo mi culo de semen en mi interior dejĂ¡ndose caer sobre mi sintiendo todo su peso en mi espalda y su respiraciĂ³n fuerte en mi oĂdo.
Nos levantamos, nos duchamos y luego nos fuimos del auto hotel dejĂ¡ndome en un lado y el siguiendo su camiĂ³n.
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